eixampleSon muchas las averías que se pueden presentar en tu cerradura, y la falta de conocimiento al respecto debe conducirnos a llamar a un cerrajero que se encargue de las reparaciones correspondientes.

Sin embargo, la cantidad de irregularidades que se presentan a raíz de la contratación de cerrajeros de poca monta, genera tal preocupación que nos lleva a investigar un poco más sobre los daños en los herrajes.

Por ende, los problemas que ocurren en las cerraduras son bastante comunes y son fáciles de descifrar una vez que los identificas.

Por supuesto, el hecho de conocer estos problemas nos ayuda mantener a raya a los falsos cerrajeros, y por otro lado nos permite confirmar sobre lo creíbles que puedan ser estos profesionales.

  1. Apertura lenta de las cerraduras

Se trata de un inconveniente que surge muy a menudo, y que lo atribuimos a “mañas” que requieren las cerraduras para su apertura.

Esto de sebe a que la suciedad se acumula en las cerraduras, y no hay forma de que estas esquirlas puedan salir de la cerradura de manera natural, en parte por la estructura que poseen estos herrajes.

Debe saber que, tratar de lubricar las cerraduras con aceite es un craso error, por lo que se debe utilizar un spray de grafito o silicona, dejando que un verdadero experto se encargue de esta labor de mantenimiento.

  1. La llave no gira

Cuando suceda esta clase de desavenencias, lo importante es tratar de no seguir forzando la llave ya que pueden ocurrir males mayores como la ruptura de la llave en cuestión.

Esto ocurre cuando el cilindro de la cerradura se desajusta, y es el siguiente nivel que atraviesan las cerraduras cuando abren de manera lenta.

Si tratar de lubricar la cerradura no soluciona el problema, lo que debe realizar el cerrajero es la sustitución del bombín correspondiente.

  1. La puerta no cierra correctamente

Los daños en las cerraduras no ocurren únicamente a nivel de los bombines o llaves, sino también en los demás elementos constituyentes de la puerta y la cerradura.

Un ejemplo de ello, es cuando las puertas no cierran correctamente, de modo que el pestillo de la cerradura no se encuentra alineado con la placa de impacto ubicada en el marco de la puerta.

Esto significa que la puerta debe realinearse a nivel de bisagras, o bien reparar cualquier daño ocurrido en el pestillo de la cerradura.

  1. La cerradura deja de funcionar

Hay momentos en que los daños en las cerraduras son completamente irreparables, lo que puede generarse por el tiempo de uso o intentos de forcejeo.

Cuando una cerradura deja de funcionar, la solución inmediata es la sustitución del herraje por uno nuevo, pues como sabrás, todos los elementos disponen de una vida útil determinada.

Por lo tanto, si dispones de conocimientos y las herramientas necesarias para reparar estas averías, puedes realizarlo sin problema alguno, de lo contrario, es recomendable acudir a profesionales que solventen esta clase de emergencias.